Ausejo

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El tío Munilla (agosto 2017)

 El Tío Munilla


El año pasado, glosé la figura del Quijote en la persona de Máximo el de Gil.

Este año voy a glosar la figura de otro hombre extraordinario evocando sus famosas frases y sus conocimientos literarios.

Una de sus frases - ¡ arre burra; que estás en la higuera!

Tenía una higuera en una viña junto al camino del Pego. La burra andaba muy despacio y le costaba mucho pasar por debajo de la higuera.
Yo se lo oí, pero yo no lo hice popular, fue él, que lo diría muchas veces.

Otra frase, - Macaria, recoge ¡Que el que vende acaba! 

Fue en las fiestas del pueblo; salieron marido y mujer una mañana a vender sandías y melones a la plaza, no vendieron nada. Al llegar el mediodía, con toda la sorna del mundo le dijo esa frase a su mujer.

Pero lo mas importante de este hombre eran los cuentos que contaba. Yo recuerdo uno, en el que el padre de una chica al entrar en la cuadra se encuentra a su hija bajo el cuerpo de un hombre. Entonces el padre antes de cometer un error reflexiona y dice para sí

- si le pego en la cabeza se besan, si le pego en el culo le ayudo, ¡anda y que se j....!

Fue cuando leí el Decamerón de Boccaccio cuando me di cuenta de que ese hombre había leido mucho y lo contaba con verdadera gracia. Yo recuerdo su figura cuando cargaba a sus espaldas el cántaro de agua hasta su casa por cuestas muy malas con peligro de caer; pero así es y será la vida, gracias a Dios hoy ya no tan mala.

Nuestro personaje vivía donde vive hoy Victor Espinosa. Tenía dos hijos, uno teniente del ejército, al que no conocí; el otro, de nombre Julio, era encargado de repartir las aguas de riego tras la subasta, tanto las de Cañete como las de las Estancas.

¡ Un HURRA por el tío Munilla!


Máximo Sicilia (agosto 2017)